La Concienciología es la ciencia que estudia la conciencia «entera», con todos sus cuerpos, existencias, experiencias, épocas y lugares de vida, en un abordaje integral, proyectivo y autoconsciente con relación a las diversas dimensiones existenciales (Nuestra Evolución, pág. 7).
El término Concienciología procede del latín: conscientia – con conocimiento, y del griego: logos – estudio. Se distingue por su proposición del Paradigma Conciencial y su método de investigación, donde la conciencia se estudia a sí misma (auto-investigación), desempeñando al mismo tiempo el papel de investigador y de objeto de estudio.
La conciencia es usted. Son también todas las personas próximas o distantes de esta vida humana y todos los seres autoconscientes de las dimensiones fuera de la vida humana.
Nuestra conciencia no es el cuerpo físico ni un subproducto del cerebro humano. Es nuestra realidad mayor, siendo más que la energía y que la materia. Podemos manifestarnos más allá del cuerpo humano y, por lo tanto, del cerebro. Este hecho puede ser verificado a través de las experiencias fuera del cuerpo o proyecciones conscientes (Projeciología).
» Nuestros conocimientos aumentan siempre,
a través de nuestros actos, en cualquier momento
y lugar en que nos manifestamos.»
El Paradigma conciencial es la Teoría-líder de la Concienciología fundamentada en la propia conciencia. Aborda el estudio de la conciencia a partir de las siguientes premisas básicas:
Es una realidad más importante, nueva o prioritaria que vale la pena ser estudiada, discutida y colocada al frente de las otras de la misma línea de investigación y, finalmente, también refutada. No hay verdades absolutas. Todo tiende a evolucionar (Nuestra Evolución, pág. 9).
Es la propuesta fundamental e insustituible del abordaje de la Concienciología a las realidades del Cosmos en cualquier dimensión, rechazando la conciencia investigadora y refutadora cualquier concepto apriorista, dogmático, sin demostración práctica, sin reflexión demorada, sin confrontación de causas, sin lógica o sin una plena racionalización personal.
Descreenciología (Siglos XX y XXI). Frente a los movimientos ideológicos de la contemporaneidad, la Descrenciología viene proporcionando, de modo indiscutible, el desmoronamiento de milenios de genuflexión ideativa de las conciencias sin libertad de pensamiento y expresión, consecuencia de los lavados cerebrales religiosos, ideológicas, políticas, filosóficas, entre otras. El principio basilar de la Neociencia Concienciología, el principio de la descreencia, libera a los investigadores para, racionalmente, sin misticismos ni creencias, investigar los hechos intrafísicos, los hechos extrafísicos, los fenómenos y los parafenómenos y, descartando cosmoéticamente, «todos los tradicionalismos sociales y religiosos creados y mantenidos fanáticamente a través de los milenios de la historia humana, en la medida en que tales prácticas actúan de manera perjudicial para la salud, el equilibrio de la personalidad y la evolución de las conciencias «(VIEIRA, 2014, p.128).