Con origen en el término latín servitĭum, la palabra servicio define la acción de servir (Estar sujeto a alguien por cualquier motivo haciendo lo que él quiere o dispone).
Un servicio es un producto de la actividad humana que satisface una necesidad, sin asumir la forma de un bien material. De las varias características propias de un servicio que permiten diferenciarlo de un producto se destaca la intangibilidad.
En el caso de la Concienciología, la disponibilidad conciencial para la asistencia es lo que marca la diferencia. En este sentido, la tendencia de las ICs es la de tener en su cartera de actividades, una prestación de «servicios» gratuita, para atender a su público-objetivo asistencial.
La UNICIN dispone de 2 (dos) tipos de servicios: el Apoyo a las Instituciones Concienciocéntricas (ICs) y a las preinstituciones Concienciocéntricas (Pre-ICs), y el Servicio de Acogida al Voluntariado (SAV).